Teniendo en cuenta el aumento del valor a nivel internacional del coleccionismo y que cada vez hay más multimillonarios dispuestos a invertir en arte, en cada temporada de subastas se alcanza un nuevo récord.
Salvatore Mundi
La obra, que a día de hoy se lleva el premio a la obra más cara del mundo, es una obra de Leonardo Da Vinci, que, sin ser una de sus obras más conocidas, asciende a un total de 450 millones de dólares, Salvatore Mundi.
Aunque a día de hoy hay una obra de arte aún más cara que Salvatore Mundi, también de Leonardo Da Vinci, pero en este caso se encuentra en el museo del Louvre, y se estima que tiene un precio de 700 millones de euros. En este caso el valor es casi incalculable teniendo en cuenta los beneficios que supone al estado francés, propietario de la obra.
Interchanged
Interchange, también llamada Interchanged, es una obra maestra del expresionismo abstracto realizada por el pintor holandés-estadounidense Willem de Kooning (1904-1997) con óleo sobre lienzo. Sus dimensiones son 200.7 por 175.3 centímetros (79.0 por 69.0 in) y se terminó en 1955.
Fue una de las primeras obras de De Kooning en las que abandonó la figura femenina y se dedicó a representar paisajes urbanos abstractos. Su técnica pictórica se vio influenciada por el artista Franz Kline, que le inspiró a pintar con trazos gestuales rápidos en lugar de pinceladas violentas. La pintura tiene una masa rosada en el centro, que simboliza a una mujer sentada. En septiembre de 2015, la Fundación David Geffen la vendió al multimillonario Kenneth C. Griffin por 300 millones de dólares, convirtiéndola en la pintura más cara del mundo hasta 2017, cuando fue superada por Salvator Mundi de Leonardo da Vinci.
The Card Players
En 2011, la familia real de Qatar adquirió una de las obras maestras del postimpresionismo francés: The Card Players, de Paul Cezanne. Pagaron 274 millones de dólares por el cuadro, que pertenecía al empresario griego George Embiricos.
Se trata de una de las cinco versiones que Cezanne pintó sobre el mismo tema entre 1890 y 1895. En esta escena, dos campesinos provenzales juegan a las cartas en silencio y concentración, sentados en una mesa de madera. A diferencia de otros pintores que retrataron partidas de cartas con borrachos y apostadores en tabernas, Cezanne simplificó el ambiente y los personajes, creando una imagen de gran fuerza y sobriedad.
Nafea faa ipoipo
Paul Gauguin pintó Nafea faa ipoipo en 1892, cuando vivía en Tahití por primera vez. Esta obra, que muestra a dos jóvenes tahitianas con vestidos diferentes, se vendió por 300 millones de dólares en 2015 a los museos de Qatar, convirtiéndose en la más cara de la historia.
La pintura refleja el interés de Gauguin por la cultura polinesia y su contraste con la europea. Una de las mujeres lleva un traje típico y la otra uno de estilo misionero. El paisaje también es parte de la expresión del artista, que usó colores vivos y formas simples.
Gauguin era un pintor posimpresionista que buscaba una forma de arte más primitiva y espiritual. Se fue a Tahití a los 43 años, huyendo de la sociedad occidental. Antes había sido marinero, agente de bolsa y coleccionista de arte. Su obra influyó en muchos artistas modernos, como Picasso y Matisse.
Número 17A
Jackson Pollock fue un artista estadounidense que se destacó por su estilo de pintura de acción, dentro del movimiento del expresionismo abstracto. Este movimiento surgió después de la Segunda Guerra Mundial y se caracterizó por la abstracción y la expresividad de las formas y los colores.
Su obra más famosa es la pintura Número 17A, que en el año 2016 se convirtió en una de las más caras de la historia del arte, al ser adquirida por el magnate Kenneth C. Griffin por unos 200 millones de dólares.
Serpientes de agua II
El pintor ruso-estadounidense Mark Rothko fue uno de los principales representantes del expresionismo abstracto. Sus obras se distinguen por sus grandes formatos y sus franjas horizontales de colores vivos.
En el 2014, el magnate ruso Dmitry Rybolovlev adquirió esta obra por 186 millones de dólares al marchante suizo Yves Bouvier. Sin embargo, la transacción generó luego conflictos legales entre las partes. A pesar de ello, esta obra sigue siendo una de las más valiosas del mundo.
O de Les Femmes d’Alger
La versión O de Les Femmes d’Alger, una obra maestra de Picasso, alcanzó los 179,4 millones de dólares en una subasta en 2015 y estableció un nuevo récord mundial para una pintura vendida de esta manera.
Picasso creó esta pintura como parte de una serie de 15 cuadros dedicados a las Mujeres de Argel, basándose en la obra homónima del pintor francés del siglo XIX Eugène Delacroix. En ella se aprecia la habilidad del artista nacido en Málaga para combinar un estilo retro con una visión innovadora y original. Se trata del Picasso más valioso que existe actualmente en una colección privada.
Nu Couché
La obra maestra de Amedeo Modigliani, Nu Couché, también llamada el Desnudo reclinado o el Desnudo rojo, es una pintura al óleo sobre lienzo de 1917 que muestra a una mujer desnuda acostada en un sofá. Es una de las obras más importantes del artista italiano, que combina el idealismo clásico con la sensualidad moderna.
La figura de la mujer desnuda parece realista y erótica, pero también tiene una belleza surrealista y casi sublime, que cautiva al espectador.
Este desnudo se vendió en 2018 en la casa Sotheby’s de Nueva York por 157,2 millones de dólares, convirtiéndose en la cuarta obra de arte más cara vendida en subasta.
La obra maestra
Roy Lichtenstein fue un artista estadounidense que se destacó en el arte pop por sus obras inspiradas en el cómic y la cultura popular. Nació en 1923 en Nueva York, en una familia judía acomodada que le apoyó en su vocación artística. Estudió en la Universidad Estatal de Ohio y se doctoró en Bellas Artes en 1949.
Al principio se dedicó al expresionismo abstracto, pero luego cambió su estilo y empezó a usar imágenes comerciales y colores vivos. Su obra más famosa es La obra maestra (1962), que muestra a una pareja frente a un cuadro que no se ve, con un globo de texto que dice: «Por qué, querida, esta pintura es una obra maestra. ¡Mi querida, pronto serás la sensación de Nueva York!». La obra forma parte del arte pop, un movimiento que cuestionaba la idea tradicional del arte y la originalidad. Lichtenstein también se inspiró en otros artistas como Rembrandt, Picasso o Matisse, y creó obras de diferentes géneros como paisajes, bodegones o retratos. Murió en 1997 por una neumonía.
Pintura de Jackson Pollock
En 2011, David Martínez compró una pintura de Jackson Pollock por 140 millones de dólares, la más cara del mundo hasta 2016. La pintura, hecha sobre un tablero de fibra de 2,4 por 1,5 metros, muestra el estilo único de Pollock de salpicar pintura sobre el lienzo, característico del expresionismo abstracto. Pollock fue un influyente artista estadounidense que creó unas 400 pinturas y 500 dibujos en su vida. Se casó con la también pintora Lee Krasner en 1945, quien le apoyó en su carrera y en su legado.
Sin duda alguno, el arte es sin duda alguna una de las inversiones que no hay que pasar por alto, ya que teniendo en cuenta está lista y la alta rentabilidad que este negocio aporta, es un mercado que hay que tener en cuenta.